Terapia de pareja
Compartir la vida con otra persona no es fácil, lo cual no significa que no sea recomendable ni enriquecedor, pero comporta trabajo. Trabajo de conocernos a nosotros mismos para saber lo que pretendemos encontrar en pareja (y por lo tanto esperamos y/o a veces exigimos) y no cargar al otro con pesos que no le corresponden; trabajo para saber ver, respetar y tolerar las diferencias del otro; trabajo de pensar en fórmulas lo más satisfactorias posibles para dos (o más) a la hora de tomar decisiones sobre los temas que hemos designado como comunes, etc.
La terapia de pareja pretende ayudar en todo esto, tanto si se está en una situación de crisis como si se quiere hacer un trabajo más bien preventivo o tratar de ver como gestionar ciertas diferencias.
¿Cómo lo haremos?
Trabajaremos conjuntamente, pero si necesitamos sesiones individuales también lo contemplaremos. Empezaréis explicando vuestro punto de vista, cada uno el suyo, y los objetivos que traéis a terapia, para poder ver si hay objetivos comunes y si estos son, de entrada, asequibles. Si la situación no es de extrema crisis (en este caso la abordaríamos y se propondrían técnicas de contención) hablaremos de quiénes sois cada uno de vosotros (no olvidemos el enfoque constructivista (link a metodología)), pues cada uno lleva en su mochila valores, creencias, patrones de interacción y formas de construir la realidad que se han heredado de las familias de origen y otros entornos, y aunque a menudo los ignoremos, tenerlos presentes nos puede ayudar a comprender dinámicas presentes. Posteriormente narraréis vuestra historia de pareja, para facilitar la comprensión del momento actual pero también para ver las deficiencias y los recursos con los que contáis o habéis contado a lo largo del tiempo. E iremos consensuando las nuevas fórmulas a través de propuestas, ejercicios en la misma consulta o para realizar en casa. Os iré acompañando en el camino hasta que sintáis que habéis encontrado un punto de equilibrio en el que os sentís cómodos los dos o hasta que veáis o decidáis que quizás este punto no es posible o no os compensa. Pues una terapia de pareja también puede ayudar a llegar a este punto, y en este caso y si así lo necesitáis, también puedo acompañaros para que la separación sea lo más plácida posible.
Y ¿cuáles son los temas más recurrentes en terapia de pareja?
- Dificultades o deficiencias en la comunicación
- Alta conflictividad y/o violencia
- Diferencias en la crianza de los hijos
- Infidelidades
- Dudas o distanciamiento
- Duelos
- Crisis vitales
- Dificultades en las relaciones sexuales
- Celos
- Abortos o pérdidas perinatales
- Rupturas
- Problemas con la familia política o extensa
- Dificultades en la convivencia (tareas, tiempo libre, etc)